ABDERA, FENICIA Y ROMANA

Abdera, hoy Adra, Almería, es una localidad que perteneció a la Bastetania, una cultura que abarcaba el sureste de la península Ibérica. aproximadamente lo que mucho después llegó a ser el Reino de Almería por unos decenios, el Reino de Granada nazarí, el Reino de Granada cristiano y la Región Granadina o Andalucía oriental.

Pronto llegaron pueblos colonizadores mediterráneos que trajeron la escritura, avanzada cultura y alguna costumbre cruel.

FENICIOS

Los fenicios formaban una cultura creada por un conjunto de ciudades independientes del cercano oriente, el actual Líbano, comienza su historia allá por el siglo XIII antes de Cristo.

Melkart, derivado del primitivo dios Baal
se convirtió en dios de la colonización y el comercio.
Készítette: Archeologo - Museo Barracco, Roma (Italia), CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=2458333

Como su tierra era pobre se dedicaron a la pesca y en mayor medida comercio marítimo. En sus viajes intercambiaban bienes que hacían más fácil la vida de unos y otros, a la vez que extendían el alfabeto y la cultura. Por las costas del norte de África e Hispania fundaron numerosas ciudades sin invadir territorios de los indígenas con quienes deseaban comerciar.

En las costas de lo que después sería la Región de Granada fundaron ciudades en promontorios deshabitados sobre desembocaduras de ríos con terreno fértil donde poder cultivar.

Costa de Adra en tiempos de los fenicios la zona más oscura.
La línea punteada representa la línea actual de la costa.
En negro, sobre una península elevada se alzaba la antigua Abdera.

Abdera, la actual Adra, se fundó a finales del siglo VIII a. Cristo. en el promontorio del cerro de Montecristo que domina la fértil desembocadura del río Adra. Igual que había ocurrido con Sks, Sexi, Almuñécar, un siglo antes aproximadamente.

En Adra hay un interesante museo que da una visión global de la historia y cultura de la ciudad, este museo es una visita obligada para quien desee conocer esta apasionante historia.

Ánfora y cerámica fenicia.

Monedas acuñadas en Abdera.

CARTAGINESES

A partir del siglo IV a. C. la colonia de Abdera queda bajo control púnico o de Cartago, antigua colonia de los fenicios que adquirió un inmenso poder. Fenicia terminó siendo conquistada por los pueblos vecinos, y Cartago quedó como señora del mar con su cruel dios Moloch (sus enormes imágenes de bronce eran huecas, en su interior se encendía fuego mientras sus brazos articulados y movidos por cadenas arrojaban niños vivos a su ardiente estomago, en otras imágenes se les introducía en su interior y a continuación se encendía un fuego en un horno inferior...).

Moloch con el fuego encendido
 y con niños dentro hasta morir en el horrible sacrificio.
By Unknown - Johann Lund, Die alten jüdischen Heiligthümer., p. 564, 
Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=56187198

ROMA

A finales del siglo II a. C. Abdera pasa a control romano, siendo el siglo I después de Cristo el de mayor esplendor, llegando a acuñar moneda propia en su ceca.

La ciudad se convirtió en puerto de salida de minerales de las sierras alpujarreñas próximas, de maderas, de salazones de pescado y garum (salsa fabricada con cabezas, piel y vísceras de pescado, muy apreciada en todo el Imperio como ya mencionaba el historiador romano Plinio el Viejo en su obra Naturalis Historia).

Recreación de nave romana mercante.

Posibles piletas de salazones en Abdera.

Panel del Museo de Adra, un lugar que es imprescindible visitar para conocer el pasado de la actual Región de Granada

Ánfora de aceite, olearia.

Otro momento de gran esplendor se produce entre el año 175 y el 225 d. C. en que la ciudad crece y se dota de nuevas construcciones.

Cerámica sigilata, de lujo.

Vasijas de vidrio

VISIGODOS Y BIZANTINOS

A partir del siglo III, la ciudad entra en un período de decadencia que la hace perder mucha población.

 En tiempos de los visigodos y bizantinos es ya muy pequeña.

Y ya en tiempos de la dominación musulmana Abdera está prácticamente deshabitada, habiéndose replegado la población al interior.

El yacimiento de Abdera ha sido expoliado durante años, sus excelentes piezas se hallan repartidas por museos de otras ciudades y colecciones privadas. Sería necesaria una excavación que mostrase parte de los tesoros de esta milenaria ciudad.